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Autorretrato tirando del párpado hacia abajo, 1910

Autorretrato tirando del párpado hacia abajo, 1910
Tiza, acuarela y colores opacos
44,3 x 30,5 cm
Albertina, Viena

Anhelo guardar un registro [...] deseo explorar, inventar, descubrir, con todos los medios a mi alcance, que ya amenazan con prender y consumirse [...] y arrojar luz sobre las más oscuras eternidades de nuestro pequeño mundo [...] Por ello, creo constantemente obras nuevas y aparentemente interminables que salen de mí [...] Soy tan rico que debo entregarme

—Egon Schiele (1)

En las obras sobre papel de Egon Schiele (Tulln, Austria, 1890–Viena, 1918) predomina la imagen del cuerpo humano. Estos autorretratos y desnudos femeninos no siguen un enfoque convencional, sino que revolucionaron el mundo del arte; especialmente los desnudos, ya que lograron que lo erótico dejara de ser considerado como algo pornográfico o caricaturesco y pasara al plano del arte elevado. El interés de Schiele por el autorretrato era algo inusual para la época y reflejaba la preocupación del artista por su vida y su identidad. Schiele desarrolló un tipo de expresionismo muy personal y reconocible que, sin embargo, utiliza recursos de la Secesión vienesa (1879–1939), como el “tratamiento decorativo de las superficies y las fluidas líneas ornamentales”. (2)

La familia de Egon Schiele no le animó a explorar su talento artístico ya que confiaba en que siguiera los pasos del padre, un empleado del ferrocarril. En lugar de ello, buscó al pintor austriaco Gustav Klimt (1862–1918), que era veintiocho años mayor que Schiele y que se convirtió en una figura paterna, tanto en lo referido a su arte como a su vida. Sus respectivos tratamientos del retrato comparten innegables similitudes compositivas, como el formato alargado, las líneas fluidas, los elementos ornamentales e, incluso, el tipo de vestiduras. Sin embargo, mientras que Klimt emplea el color a menudo para decorar el atavío de sus personajes, Schiele lo despliega para expresar estados de ánimo interiores, de la mente. Cuerpos contorsionados, poses asimétricas y contornos desiguales muestran en las obras de Schiele su gran preocupación por la estructura y por la línea. Pese a que las pinturas de Klimt son, con frecuencia, celebraciones de la belleza, las de Schiele subrayan, de forma intencionada, lo feo, la sexualidad explícita o lo mórbido.

Ya desde sus inicios, Schiele se mostró interesado por el autorretrato. Incluso antes de su examen de ingreso en la Akademie der bildenden Künste (Academia de Bellas Artes) de Viena en 1906, había pintado diez retratos de sí mismo. Muchos de sus autorretratos están considerados como simbólicos, puesto que solía representarse como monje o eremita y, tras 1914, como un santo mártir (3). Su Autorretrato tirando del párpado hacia abajo, de 1910, es ejemplo de la influencia de la obra de Klimt y también de cómo se aleja de esta. Utiliza en ella colores brillantes y decorativos que recuerdan a Klimt en las vestiduras, mientras que la pose transmite una nueva expresión del lenguaje gestual. Junto a la cabeza ladeada, la colocación de la figura a la derecha de la hoja genera asimetría en la composición. El gesto sugiere el peso de los pensamientos y sentimientos de Schiele. Otros de sus autorretratos revelan su preocupación por la muerte, el amor, el sexo y el proceso de convertirse en artista.

1. Egon Schiele, citado en Egon Schiele: The Leopold Collection, Vienna, cat. expo. (Colonia: DuMont; Nueva York: Museum of Modern Art, 1998), pág. 32.

2. “Egon Schiele, 7 de diciembre, 2005–19 de marzo, 2006,” Albertina, Viena.

3. Egon Schiele, pág. 23.

 

Preguntas

Observen juntos el Autorretrato tirando del párpado hacia abajo, 1910, de Egon Schiele. Pregunte a su alumnado, ¿qué aspectos les llaman la atención en este retrato? ¿Cómo describirían el color y los elementos decorativos empleados por el artista? ¿Cómo describirían las vestiduras?

Seguidamente pídales que se fijen en la expresión de la cara y el lenguaje corporal de este retrato, que describan la pose. Haga que un alumno se ponga de pie e imite la postura del retrato, ¿les parece que está cómodo, angustiado o relajado? ¿Cómo creen que se siente el hombre del retrato?

Gustav Klimt era el mentor de Schiele. Pida a sus alumnos que busque imágenes de retratos de Klimt y los comparen con esta obra. ¿Qué similitudes y diferencias aprecian entre ellas?

¿Cómo empleaba Schiele la línea? Sus alumnos pueden intentar dibujar las líneas más importantes del retrato (incluso pueden hacerlas en el aire con pinceles imaginarios). ¿Cómo las describirían? Comente con ellos cómo contrastan las zonas de color con el uso de la línea.

Explique a sus estudiantes que esta obra es un autorretrato. ¿Creen ellos que se trata de otro tipo de obra? Muchos han descrito el gesto de la mano tirando del párpado como poco armonioso y desestabilizador, como representando el peso de los pensamientos y sentimientos del artista. ¿Qué opinan sus alumnos de ello? Si el artista pudiera decir algo, ¿qué creen que diría?

Pregúnteles cómo se representarían en un autorretrato, qué tipos de colores y líneas emplearían, cómo posarían o qué querrían decir con la expresión de sus rostros.