Actualmente expuesta (Sala 303)

Faquires

1993Óleo, resina y cartón sobre tela de algodón
305,6 x 244,5 x 7 cm

En las décadas de 1960 y 1970 se produjo lo que se ha dado en llamar la "desmaterialización" del objeto artístico: los movimientos más importantes de aquella época preconizaban obras con economía de medios, que solían centrarse en una idea o concepto, más que en el propio objeto. Por el contrario, los primeros años de la década de 1980 se caracterizaron por una vuelta a las tradiciones, tanto en pintura como en escultura. Fue en este período, tras dos décadas de dominio de la estética del Arte Minimalista y Conceptual, cuando Julian Schnabel desempeñó un papel esencial en el nacimiento de la pintura neoexpresionista en Estados Unidos, con una pincelada gestual y la elección de temas figurativos que supusieron para la pintura un cambio de orientación radical.

En 1987, Schnabel comenzó a crear obras en las que el tema es la palabra escrita y los nombres propios. Las primeras composiciones de esta serie suponen un cambio en el que no solo abandona la narrativa pictórica que había caracterizado su obra anterior, sustituida ahora por una referencia lingüística oblicua, sino también la iconografía del exceso, adoptando una deliberada austeridad. Dentro de esta serie, Faquires (Fakires) marcaba una vuelta a una paleta más rica y a una superficie con más capas y más expresionista que las de las primeras obras con palabras. En diagonal, aparece garabateada la palabra "fakires", una referencia a los místicos sufíes, a los que suele vincularse con el ascetismo y las hazañas de resistencia extrema o mortificación corpórea. En opinión de Kevin Power, "La palabra sugiere la identificación de Schnabel con todos los que sufren por nosotros, el dolor que inevitablemente nos acompaña en el mundo. Esta obra está impregnada de humanidad manchada y transmite la inutilidad de los gestos del faquir, pero permanece el triunfo del individuo manchado de sangre. La sensación de sacrificio forma parte esencial de lo sagrado y la imagen es un poderoso transmisor de significado".

Título original

Fakires

Fecha

1993

Técnica / Materiales

Óleo, resina y cartón sobre tela de algodón

Más info

Donación de Bruno Bischofberger, Zúrich

Dimensiones

305,6 x 244,5 x 7 cm

Crédito

Guggenheim Bilbao Museoa