Las damas de Boisgeloup

En 1930 Picasso adquirió el Château de Boisgeloup, transformó uno de sus establos en taller y por primera vez dispuso de un amplio espacio donde desarrollar su obra escultórica. El yeso se convirtió en su material predilecto y la fisonomía de la joven Marie-Thérèse Walter inspiró gran parte de las obras realizadas durante este periodo. En esta exposición podemos ver tres variaciones del busto de Marie-Thérèse creadas en 1931; dos de ellas, inicialmente realizadas en yeso en 1931, están presentes aquí en las versiones en cemento que se presentaron en el Pabellón Español de la Exposición Internacional de París de 1937.