Diversión en el arte
¡Te damos la bienvenida al Museo Guggenheim Bilbao!
¿Puede el arte ayudar a comprender mejor nuestras emociones?
Visita el Museo de forma autónoma y descubre algunas obras de la Colección que despiertan e inspiran diversión y disfrute en otros visitantes, y quizá también en ti. Esta selección de obras se ha realizado en base a los resultados de ARTETIK: From the Art, un experimento digital sobre la relación entre el arte y las emociones, en el que tú también podrás participar durante este recorrido.
Esperamos que esta experiencia te resulte gratificante.
La materia del tiempo
Sala 104, primera planta
Entra al Museo y, una vez en el Atrio, accede a la sala 104, donde encontrarás la monumental instalación La materia del tiempo, una de las obras más importantes del artista estadounidense Richard Serra.
Serra es uno de los escultores más destacados del siglo XX. Sus innovadoras esculturas evidencian el proceso de fabricación y las características del material; en este caso, el acero autopatinable, que el artista aprendió a moldear durante los años en que trabajó en una acería. Con este material, y con un programa informático llamado Catia, Serra crea enormes esculturas partiendo de formas geométricas como elipses, espirales, secciones de esferas y toros, conos, etc.
Serra invita a los visitantes a experimentar las esculturas caminando a través de ellas, en su interior y a su alrededor. Las ocho esculturas que componen la instalación están pensadas para que produzcan una experiencia que implica también el enorme espacio expositivo que ocupan. Se trata de una vivencia en el tiempo mientras se recorre este espacio y cada persona la recorre de forma distinta.
¿Qué sensaciones experimentas al transitar por la obra? ¿Cómo las describirías?
Al final de la sala encontrarás un espacio didáctico que contiene, entre otros recursos, una maqueta de la instalación diseñada por el artista.
Richard Serra
La materia del tiempo
(The Matter of Time), 1994–2005
Acero patinable
Dimensiones variables
Guggenheim Bilbao Museoa
Despertándose
Sala 303, tercera planta
Cuando Gilbert & George se conocieron, comenzaron a trabajar y vivir juntos, y fundieron sus identidades artísticas en una. No establecen ninguna distinción entre su vida y su arte: ellos son sus propias obras de arte. A finales de la década de 1960 comenzaron a aparecer en público como “esculturas vivientes”, convirtiendo sus actividades rutinarias en espectáculos.
Gilbert & George emplean diversas disciplinas, como la fotografía, el dibujo, la pintura, el texto escrito y el cine, y al igual que en sus performances, en todas se aprecia claramente su presencia, a menudo en forma de autorretratos.
Desde mediados de la década de 1970 adoptan el formato de cuadrícula para sus obras fotográficas y a comienzos de los años ochenta tiñen sus collages fotográficos de colores chillones, evocando la tradición de las vidrieras de las iglesias. Todas estas características se pueden apreciar en Despertándose, de 1984.
Además, su producción de este período está inspirada en los detalles de la sociedad del East End londinense y en la experiencia homosexual urbana con el fin de representar los misterios de la existencia humana.
Gilbert & George
Despertándose (Waking), 1984
Composición fotográfica
363 x 1.111 cm
Guggenheim Bilbao Museoa
Tulipanes
Sala 303, tercera planta
En esta misma sala encontrarás la obra Tulipanes, del artista estadounidense Jeff Koons.
Koons desafió los límites entre cultura elevada y cultura popular a mediados de la década de 1980 en obras en las que empleaba el lenguaje visual de la publicidad, el marketing y la industria del ocio con el propósito de “comunicarse con las masas”.
Su escultura Tulipanes (Tulips), un ramo de flores concebidas a modo de globos de colores de proporciones gigantescas (más de 2 metros de alto y 5 metros de ancho), pertenece a la ambiciosa serie Celebración (Celebration), iniciada en 1994. Inspiradas en los objetos populares asociados a las fiestas de cumpleaños, las vacaciones y demás acontecimientos festivos, las pinturas y esculturas de la serie Celebración reflejan la constante relación de Koons con elementos propios de la infancia.
En Tulipanes y en su imponente Puppy, situado en la plaza del Museo, Koons manipula la escala y los materiales hasta límites insospechados. ¿Qué crees que busca provocar en los espectadores con ello?
Jeff Koons
Tulipanes (Tulips), 1995–2004
Acero inoxidable alto en cromo con laca de color translúcida
203 x 460 x 520 cm
Guggenheim Bilbao Museoa
ARTETIK: From the Art
Pasillo junto a sala 303
¿Qué sientes al contemplar una obra de arte? ¿Experimentan otras personas lo mismo ante una misma pieza? ¡No te pierdas la iniciativa digital ARTETIK: From the Art!
Esta instalación te permite explorar tus emociones en relación con las obras de arte que forman parte de la Colección del Museo Guggenheim Bilbao. Se trata de una experiencia digital que se va completando con el paso del tiempo, generando un gráfico colectivo de emociones a medida que las distintas personas interactúan con la herramienta.
¡Siente el arte con la Colección del Museo y comparte tus emociones! También puedes descubrir otras obras que despiertan diversión en quienes las contemplan.
Este proyecto es una colaboración entre el Museo Guggenheim Bilbao y Google Arts & Culture.
Puppy
Plaza del Museo
Cuando salgas del Museo encontrarás la obra Puppy, de Jeff Koons, con la que el artista aúna pasado y presente al emplear un sofisticado modelo de ordenador para crear una escultura que hace referencia a un jardín clásico europeo del siglo XVIII. Este West Highland terrier gigante completamente cubierto de plantas en flor emplea una iconografía edulcorada —flores y perritos— para construir un monumento al sentimentalismo.
En esta obra, el artista manipula la escala y combina referencias a la cultura elitista y la cultura popular, desde el arte de esculpir arbustos o la cría de perros hasta la cerámica decorativa o las tarjetas con mensajes de buenos deseos.
Koons diseñó esta escultura con la finalidad de atraer, suscitar optimismo e infundir, en sus propias palabras, “confianza y seguridad”. Majestuoso y robusto mientras hace guardia a las puertas del Museo, Puppy llena a los espectadores de admiración y de alegría, y se ha convertido ya en todo un símbolo de la ciudad de Bilbao.
¿Sabías que Puppy es una obra de arte “viva”? Está cubierta por 35.000 plantas en flor; en primavera se plantan begonias, alegrías, petunias, lobelias, claveles indios y claveles chinos de colores rojos, naranjas, rosas y blancos; y en otoño, pensamientos.
Jeff Koons
Puppy, 1992
Acero inoxidable, sustrato y plantas en floración
1240 x 1240 x 820 cm
Guggenheim Bilbao Museoa
Este recorrido ha finalizado, aunque estos son solo algunos ejemplos de obras que producen diversión en los visitantes. Déjate llevar, continúa visitando el Museo por tu cuenta y encontrando diversión en el arte.
Esperamos que hayas disfrutado de esta experiencia ¡Hasta pronto!